No es mucho, pero es algo
Hace un tiempo, cuando se concretó mi salida de los Andes para venir al doctorado, manifesté abiertamente que me gustaba la idea de poner las actividades de mis clases de los Andes a disposición del público. Digamos, para sonar ambiciosos, “compartir mi conocimiento con el mundo” (todos sabemos que eso es tan volátil como ambiguo, así que solo lo digo a manera de burla).
En fin, volviendo al tema, intenté usar el servicio de carga de archivos de los Andes, el ftp de profesores, pero tenía un pequeño inconveniente: no hay soporte para mostrar automáticamente los archivos que se agregan. Es decir, si agrego un archivo, me toca cambiar además una página de acceso que muestre que el archivo existe, enlazarlo y demás. Y soy perezoso, así que no.
Dejé las cosas así, no había tampoco mucho tiempo para ponerle atención a eso, igual que no lo hay ahora. Pero como cosa curiosa, entre todos los pequeños detalles que pasan frente a nuestros ojos y no los percibimos, en mi trabajo y mis clases aquí se usa mucho el asunto de compartir archivos, bien sea a través de Sakai (NYU Classes que lo llaman), Dropbox, Box u otros servicios. Y entonces recordé que, siendo como me describo a mi mismo “esclavo de la corporación Microsoft”, tengo muchos de mis archivos en OneDrive (el equivalente Microsoft de Dropbox o iCloud) y que en OneDrive es posible compartir carpetas enteras. Así que abrí una carpeta al público, que he llamado Materiales, en la que están cargadas las que considero más interesantes de las actividades de mis cursos en los Andes. La cosa todavía está desorganizadísima, los archivos tienen exactamente los nombres con los que yo los tenía en mis carpetas (que pueden no tener mucho sentido para los demás) y todo ese tipo de cosas, así que buscar algo ahí es como arqueología, pero es un inicio. Tengo para todas esas actividades el archivo base de LaTeX y el resultado para Adobe Reader (en otras palabras el .tex y el .pdf) así como los dibujos en caso de que se necesiten.
Queda la carpeta entonces abierta al público, intentaré en algún momento nutrirla más, seguramente cargaré también cosas de lo que hice en el San Carlos más adelante y haré lo posible por organizarla también. Cuando haya tiempo o un alma caritativa que quiera hacer un aporte. La única condición de uso es que se atribuya autoría intelectual (que forma tan fea de decir que digan que lo tomaron de mis archivos). La dirección es https://onedrive.live.com/?cid=6b3a5c075e4c3a28&id=6B3A5C075E4C3A28%2117957&ithint=folder,&authkey=!ADFceCd7zkoakVs
Si quieren compartir algún archivo por ahí toda contribución es bienvenida, si quieren hacer un comentario igual. Como siempre quedan abiertos los medios tradicionales de comunicación, correo electrónico osbernal@gmail.com y cuenta de Twitter @osbernal están siempre ahí.